Índice
- 1 El desagradable sabor del cloro en el agua en casa
- 2 Ciertos remedios caseros para prosperar el sabor del agua en casa
- 3 Soluciones tecnológicas para disfrutar de agua de confianza
- 4 La mejor y la peor agua de España
- 5 Para mayor calma, analiza el agua del grifo
- 6 Agua buena en la cocina para toda la familia
- 7 Agua de calidad para ganar salud y tiempo y ahorrar dinero
Pese a que en la mayoría de pueblos y ciudades de España el agua del grifo es apta para el consumo humano, en determinadas zonas no es aconsejable beber el agua en casa debido a su sabor desapacible y también a la enorme cantidad de productos químicos que se emplean para transformarla en potable. Afirman que el agua debería ser incolora, sin olor e sosa, pero la realidad es terca y solo hace falta abrir el grifo para darse cuenta de que en muchos casos no es de esta manera.
Muy frecuentemente el agua en casa no es transparente, sino al llenar el vaso es de color blanquecino. Incluso, a pesar de que empleemos un vaso transparente, al comienzo miramos al trasluz el vaso del agua y somos inútiles de ver lo que hay detrás del cristal hasta el momento en que las substancias que dan el color blanco se depositan o se evaporan.
El desagradable sabor del cloro en el agua en casa
Otras veces el agua tiene olores y sabores raros provenientes de las cañerías y de las canalizaciones de agua, o del empleo de las sustancias químicas que las compañías suministradoras de agua emplean, lo cual genera falta de confianza y también insatisfacción en los usuarios, que no cuentan con agua de calidad en casa y tienen que gastar el dinero en agua mineral o bien invertir en un equipo de purificación familiar de ósmosis inversa.
El mal sabor del agua del grifo puede tener que ver con la dureza del agua. En dependencia de la zona geográfica en la que vivamos y de cuál sea la cuenca hidrográfica desde la que nos abastecemos, tendremos agua dura, blanda o media. Normalmente, podemos decir que en España, en las zonas y comunidades autónomas del norte el agua es dura, al tiempo que en la cuenca mediterránea el agua acostumbra a ser blanda.
En este sentido, el agua del grifo contiene sales minerales como algunos otros nutrientes, que de alguna manera pueden influir en el sabor y el olor de la misma. Se estima que las aguas que son ricas en componentes como el calcio, el potasio o bien el magnesio pueden tener un sabor más intenso que aquellas aguas que son pobres en estas sustancias.
Las compañías suministradoras de agua emplean productos químicos para purificar y garantizar la calidad del agua, conforme a unos parámetros sanitarios establecidos. Desde hace bastantes años, el cloro es el producto desinfectante del agua más utilizado en el mundo entero. Su gran efectividad y confiabilidad para eliminar microbios que puedan haber tanto en el agua como en las cañerías o bien los depósitos hace que sea el más empleado.
Ciertos remedios caseros para prosperar el sabor del agua en casa
Pese a que la Organización Mundial de la Salud aconseja el uso del cloro para potabilizar el agua, lo que está claro es que a absolutamente nadie le gusta beber un vaso de agua con sabor a cloro. La OMS establece las cantidades que se pueden emplear para que no suponga un riesgo para la salud.
Hay varias formas de compensar o suprimir el exceso de cloro que a veces hay en el agua del grifo. La más recomendable es instalar un equipo de purificación de osmosis inversa, que elimine el exceso de cloro a través de los filtros de lignito activo granulado.
Hay otros remedios caseros para progresar el sabor y el fragancia del agua. Uno de ellos es ocupar jarras de agua del grifo de cada, y dejarla a temperatura ambiente destapada media hora más o menos para que de tiempo a que el cloro se pueda evaporar. Pasado este tiempo se debe cubrir y guardar en el refrigerador. Al estar fría, conseguiremos eliminar el sabor y el olor del cloro. Otra alternativa para esconder el sabor y olor a cloro es añadir al agua una gota de jugo natural de limón.
Soluciones tecnológicas para disfrutar de agua de confianza
En la actualidad hay soluciones tecnológicas para prosperar la calidad del agua en tu casa por medio de descalcificadores o bien de equipos de osmosis. En dependencia de cuál sea el problema y qué resultado queramos obtener, utilizaremos un sistema u otro si sabe mal el agua en casa. Mas más allá de esto, no podemos seleccionar cuáles son las peculiaridades químicas del agua que nos proporciona nuestra compañía suministradora.
Conque en dependencia de la ciudad, región o bien provincia en la que vivas, tendrás un agua de unas características o bien de otras. Por tanto, en ciertas regiones, zonas o bien poblaciones sabe mal el agua en casa, aunque el problema de la falta de calidad en el agua del grifo es más evidente que en otras. Por servirnos de un ejemplo, si vives en alguna ciudad o bien pueblo del área mediterránea, probablemente no estarás contento con el sabor ni con el color ni el fragancia del agua que sale de tu grifo. Te contamos porqué enseguida.
La mejor y la peor agua de España
Las razones por las cuales la calidad del agua es tan baja en la zona mediterránea hay que procurarlas en las características del suelo y del subsuelo. En esta área geográfica sabe mal el agua en casa en tanto que contiene -por norma general- una cantidad excesiva de cal. Por esta razón los ciudadanos de las provincias de Almería, Murcia, Málaga, Baleares, Alicante, Castellón, Valencia, Tarragona y Barna cuentan con la peor calidad del agua. Para que esta agua sea potable es sometida a tratamientos químicos con cloro y otras substancias, con el objetivo de reducir el exceso de dureza en el agua. Se estima que el agua es excesivamente dura cuando la cantidad de carbonato de calcio excede los 550 mg/l.
El motivo por el cual sabe mal el agua en casa es que como las poblaciones están cerca de la costa, tienen más sedimentos. Además, en algunas poblaciones del interior se efectúan trabajos de minería o bien en el campo industrial, lo que afecta a la calidad del agua que baja de las montañas o de los ríos. Generalizando, podríamos decir que el agua de la cuenca mediterránea es muy desagradable para beber y que es no es la más adecuada para el cuidado de nuestro pelo y nuestra piel. Además, ocasiona daño en el funcionamiento de nuestros electrodomésticos como la lavadora o el lavaplatos, reduciendo su vida útil.
En el otro lado, tenemos las urbes que -generalmente- se considera que tienen la mejor agua del país. Se trata de ayuntamientos en los que el agua del grifo tiene una cantidad de carbonato de calcio cerca de los 150 mg/l. Las urbes con la mejor agua del país son -conforme un reciente informe de la Organización de Usuarios y Usuarios (OCU)- Burgos, San Sebastián y Las Palmas. Por lo general se considera positivo que el agua de casa sea débil mineralmente hablando, si bien también tiene sus inconvenientes, como un menor aporte de calcio y de sales.
Para mayor calma, analiza el agua del grifo
Por nuestra seguridad y por la salud y el bienestar de nuestra familia, deberíamos realizar un análisis químico y bacteriológico del agua que sale de nuestro grifo. Muchas veces nos quejamos de que sabe mal el agua en casa, pero el problema no es tanto el sabor sino más bien la cantidad de bacterias, hongos y virus que puede llegar a contener cada gota de agua. Posiblemente un vaso de agua aparentemente buena y transparente contenga partículas que son invisibles a nuestros ojos pero que son muy perjudiciales para nuestra salud.
Normalmente nos falta información sobre de qué forma es el recorrido del agua que llega hasta nuestros hogares, y a la que estudiamos un tanto aumentan nuestras dudas sobre la calidad de exactamente la misma. El agua del grifo procede de manantiales, ríos y pozos, y después es tratada en plantas potabilizadoras. Para que el agua sea potable se emplean productos químicos, después el agua es almacenada en depósitos y se distribuye por la urbe mediante las tuberías. Y de ahí va al grifo de nuestra casa. Por lo tanto, desde el momento en que se potabiliza en la planta hasta el momento en que sale de nuestro grifo hay un largo recorrido por el medio. La instalación de sistemas de tratamiento en casa, como los equipos de osmosis, es la única garantía para disfrutar en la casa del agua de la mejor calidad y seguridad para el consumo.
Agua buena en la cocina para toda la familia
Cuando el agua en casa sabe mal lo notamos en el momento en que nos ponemos delante de los fogones. Los chefs saben, por experiencia, que el agua de mala calidad no es indicada para cocinar ni para nutrir a tu familia. Por esta razón la mayor parte de buenos hoteles y restaurants tienen instalados sistemas de osmosis y otros equipos para progresar la calidad del agua, reducir la dureza y mejorar el sabor.
El agua exageradamente dura produce muchos inconvenientes. Primeramente por el sabor, y en segundo lugar, pues el alto contenido en minerales y cal difiere el tiempo de cocción en los ingredientes, con lo que, se pierden muchos de los nutrientes. Solo hay que mirar las etiquetas de ciertos comestibles que adquirimos para darnos cuenta de que vale la pena instalar un sistema de ósmosis en casa o reducir la cal para tener un agua más blanda.
Agua de calidad para ganar salud y tiempo y ahorrar dinero
El agua exageradamente dura, aparte de que sabe mal, hace que las legumbres tarden hasta una hora más en cocerse. Asimismo cuando preparamos infusiones como el té o el café, o bien alimentos infantiles para los bebés, nos aconsejan emplear agua de mineralización enclenque. El agua blanda respeta más las propiedades nutricionales de los comestibles, así como los aromas y los sabores naturales de los ingredientes.
Aparte de la cuestión de la alimentación, hay otro aspecto que no debemos olvidar, y es la cuestión del ahorro energético. Al reducir el tiempo de cocción, reducimos el uso de electricidad o bien de gas, con lo que podemos reducir la factura del suministro y llevarnos una alegría al final de mes. Esto no sólo es útil cuando al paso que destinamos a cocinar, sino más bien asimismo el tiempo que logramos reducir cuando utilizamos el lavaplatos o la lavadora.